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Ceshire

Vulnerable

Vulnerable Yo muero extrañamente... No me mata la Vida
no me mata la Muerte no me mata el Amor;
muero de un pensamiento mudo como una herida...
¿No habeis sentido nunca el extraño dolor
de un pensamiento inmenso que se arraiga en la vida
devorando alma y carne, y no alcanza a dar flor?
¿Nunca llevasteis dentro una estrella dormida
que os abrasaba enteros y no daba un fulgor?...
...
Lo inefable. Delmira Agustini.
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Hoy mirando la playa de Dorado pensé que el mar y yo somos ánimas similares; a veces dóciles, otras tempestuosas, tan llenos los dos de vida y horrores, Tánatos y Afrodita enamorados. No es casualidad que la playa de noche me provoque el mismo pavor que cuando aburrida busco fantasías en los rincones poco iluminados de mi mente, y en su lugar encuentro material para pesadillas. Hay una profundidad indómita en mi psique, un cierto espanto o cordura que se acerca a la locura de forma vertiginosa. Atreverme a pensarme en mi caso es una aventura peligrosa, pero yo soy valiente o trato de serlo o en realidad es el morbo lo que me incita a navegar en las aguas oscuras de mi cabeza. Y temo pulsar el botón equivocado y horror que no hay vueltra atrás, y la vida no era eso que me enseñaron en el catecismo, tampoco lo que me enseñé yo más tarde (pseudogurúdelasjustificaciones). Los miedos, todos, siempre han estado aquí, mienta yo o callen los demás. Encienda una vela púrpura, haga mantras o rece este rosario gastado. Y todo el dolor, la confusión, la inseguridad, la frustación, la tristeza, y la desesperanza, todo, todo lo que guardé de niña como una ofensa de nunca jamás ha mutado en dragones de aspecto cristalino y líquido que me asechan en sueños, nariz con nariz ¿Te imaginas?. El dragón de la desesperanza es peculiarmente peligroso. Parecería que te ha hecho un favor y se ha comido a los otros dragones cuando sólo los nutre en su interior. Y ya vez que la mujer del espejo es mentira y sólo en sueños podrás verme tal cual. Un enorme monstruo panzón dormitando en mi cerebro, la cola enroscada dentro de mi pecho, un peculiar cuco espanta palabras.

1 comentario

jorge -

que difícil es escribirte en este blog complicado para la comunicación con el autor. Ya estoy aquí para decirte que me gusta tu poesía