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Ceshire

Mis poemas

Tu siempre vas a ser...

Tu siempre vas a ser...

Tú siempre vas a ser
esa musa secreta
que desde mi mundo onírico
acaricia mi existencia
sólo para recordarme
desde mis sueños húmedos
que el amor cuando es amor
aún si termina no muere
sino que permanece siempre
anclado al pensamiento
con el rostro melancólico
del sentimiento mutante
que aun cuando se suplanta
sobrevive inmáculo
con la virtud de Dios
y la latencia del hongo.

Gatuno

Gatuno


Yo te quiero porque ves
aquello que se me ha perdido
y me haces transparente
como el rayo a la arena.
Porque entiendes al gato
que abraza tu mano.
Esa fiera patas arriba
con la panza a la carta
y las uñas retraídas.
Porque tu mano permanece
como la mano del dueño
que acaricia la esperanza
noble del regreso.
porque siempre dejas la ventana abierta
y sabes que quien ama no posee;
se posee.

Lista

Lista

Trataron de hacerme
puertorriqueña,
cubana y gringa;
speak, see, hear, no evil;
tres veces extranjera,
foránea de mi misma:
Frankenstein.
Devota, necia y suspicaz.
Clasista e Intolerante,
blanca, prepotente,
virgen, ortodoxa,
asexual.
Ca tó li ca,
fa ná ti ca,
po lí ti ca,
ho mo fó bi ca,
her mé tica,
y crí ti ca.
Mujer y machista,
costilla, chancleta,
enser, sinser,
lavaplato, plancha,
maquina de coser.
sin tética, sim bólica,
hija, esposa, madre,
no mujer mujer.
Obediente, discreta,
oído, no boca,
apén dice,
fría, privada,
troglodita,
línea, no curva,
Dr. Jeckyll, Mr. Hyde.

Sólo lograron la culpa.

Saboteadora

Saboteadora

Miente, te quiere mansa
como animal cautivo.
Tanto teme a la foresta
que se gastará horas
trenzando jaulas como kimonos;
obis dorados con los que aprisionarte.
Si la dejas, si te fías de ella,
te echará para siempre a una okiya
y abanicará incluso la esperanza.

AFRODITA

AFRODITA

Las virtudes son defectos
si se pintan en los techos
con siluetas de mujer.
En tus ojos son perfectas
sólo porque no conoces
las flaquezas de las formas.
La mentira de la carne
viene en vivo y a color.

Afrodita está muerta.

Algodón

Algodón

ALGODON

The insane are physically ill”.
---Henry Cotton (1886-1933).

Dos lunas de sal
atornillan mi cabeza,
me oxidan la razón;
no diré que eres tú:
tendrían que sacarme el corazón.

El doctor Algodón,
serrucha mis miembros,
ya no me quedan muelas;
Tu noche prevalece.
Soy un muñón, sobreviviéndonos.

Son tiempos difíciles.

CICATRICES SIN DUEÑOS

CICATRICES SIN DUEÑOS

Tal vez tenga tendencia a la duda
y mi muerte se haga lenta,
pero es peor quien se muere
sin conocer la ponzoña
asesina de sus sueños.
Y denomina con voz errada,
a su suerte, meras causas naturales.
Es peor, y no lo dudes,
exhibir cicatrices sin dueños.

Filia interior

Filia interior

Yo te quiero compleja,
viciosa y caótica.
Sin brújula, ni pista,
ni idea: mórbida.
En tus experimentos,
mementos
y proyectos alienígenas.
En tus pesadillas sórdidas.
Apocada o engreída.
Casi casi una monja,
relapsa.
Te quiero contradictoria.

Blanco/negro

Blanco/negro

Una brigada de monjes del medioevo
está haciendo de mis sueños
su campo de guerra.
Como Maniqueo
alucino en blanco y negro.

La ciudad de los héroes

La ciudad de los héroes

En la ciudad de los héroes,
arden los orbitales,
desbordando chicotes
en los ojos de ceniza.
La gente suda aceite
y se baña con cuchillas
para afilarse los dientes.

Aquí todos son héroes;
no hay remedio ni culpa,
la piel burbujea instinto,
con maque de quemasdá.
Se camina con la lengua.
Las lagrimas se evaporan
al contacto con la piel.

¡No se consigue llorar!
Que se salve quien pueda.

Ilegítima

Ilegítima

Llegará el día en que agotaré
la última metáfora.
Entonces no habrá remedio
y por desmemoria o descuido
primero croará la duda
y luego se hará el olvido.

Si acaso un domingo
coincidiremos. Seremos
lo suficientemente necios
para fingirnos estúpidos
analfabetos de símbolos;
dos brutos que se saludan
con tres dedos mórbidos,
o la mitad de una sonrisa
o un beso sórdido,
pero siempre con la mitad de algo.

Te digo,
llegará ese día
en que dejará de obsesionarme
tu sombra de las manzanas,
los puentes y la ría.
No hallaré en ella miradas de espejo
ni pistolas de señas.
Tampoco alegorías
ni mapas, ni embajadores,
que completen el paisaje
que dejaste a medias.

Hombre egoísta
mira, estoy cansada.
Tu pañuelo amarillo tiene ya
lunares de hongo.
Ya no te reconozco y temo
desaparecer como Amelia Earhart
por obstinarme en el aire.
No quiero esta obsesión ilegítima,
que acaso sin saber una noche me anudaste,
quítamela.
O mejor estírala hasta que se parta
y nos sangre el ombligo.

Electra

Electra

Electra

pasión zen;
no sata, sí cilla,
vulgar fisiología,
fragilidad.
Prodigio de ser tú,
inequidad,
muralla o dicotomía.
Yo también
quisiera
penetrar tu anatomía.

Pejesapa

Pejesapa

No sé cuándo me cambió la mirada
y me salió un sedal en el centro de la frente.
Por qué me gusté pejesapa y monstruo;
canibal agazapada en una cama de algas.
Cuando sucedió aquello del mimetismo y las babosas,
de presumir el veneno, de esconder la boca,
de pescar con carnada de mi propia garganta.

Pejesapa asustada me llené de aire.
Dos veces mi tamaño es una carga muy grande.

Laureles

Laureles

La verdad soy sola
y sin ser a veces
mi voz de filoygrana
me puede.
La ilusión impide ver
el relleno de confeti,
las bolas de celofán,
la niña con la toquilla,
interpretando sabandijas.
Atenas se cose los labios:
develar es entretenimiento
exclusivamente humano.
Una niña hace acrobacias,
el cable es largo, no hay malla;
sólo yo conozco el enemigo
que habita en su ADN.
Conjuro a Niké y aparece
un par de tenis de correr.
La vida entera se compendia
en competir y vencer.

Nunca he entendido nada, por ejemplo:
¿por qué hay sangre en los laureles?


Sobre el recuerdo

Sobre el recuerdo

Por que no hay poesía festiva, alguien había dicho, pues quizá, solo del tiempo y lo irreparable puede hablar. Y también alguna ves se dijo pero ¿quien ¿cuando? que todo un día será pasado y olvidado y borrado: hasta los formidables muros y el gran foso que rodeaba la inexpugnable fortaleza.
-E.Sabato

El recuerdo
convalece.
Eternamente
se nos muere.
En pedazos.
la memoria
nos traiciona.
Se va
y nos deja
la casa vacía.
¡Escribamos!

NARCISO

NARCISO NARCISO

¿Nunca lo vas a entender?
Soy el distal de tu mano
que ondula mil elegías.
Soy la efigie de ti mismo
reflejándose en el agua;
el cristal roto de tu espalda,
la ciénaga empantanándote,
la elipsis que te congela.
¿Nunca lo vas a entender?
-“Soy tu peor enemigo”.

(Y Narciso cae al río).

Colgada

Colgada Tú piensas en voz alta;
yo hablo en susurros
y a veces
en símbolos que son ermitaños
drogadictos al éter;
ese fluido sin peso
que me ocupa la mente.
Borra de mi frente
la carta número nueve;
quita a Diógenes
salva la linterna.
Sé mi sol, mi voz,
mi diez añadido;
perdóname.

Amor...
tú eres transparente,
magnánimo, nada guardas,
todo, todo me lo das:
bancos de Discos rojos,
Nubes Blancas, el pez Angel,
Sardinas de siete colores;
conoce
que no mereces soledades.
Mete la linterna en mi garganta,
sacude cada Zebra de su grieta,
encara mis Ancistrus de Tres Rayos,
ve que son inofensivos.

Abre mi boca, ven,
devora
los erizos.
Te regalo la renuncia
y pongo de cabeza mis ascetas.

Phi

Phi La vida es esa proporción
que me exige ser (de) alguien.
Amor/odio/amor/odio,
el fino hilo del espíritu
se (des)cose en mi carne
y al final no soy (de) nadie.
No, yo no soy mia,
siquiera soy de mi madre
que me parió creyendo la mentira
de que tendría una hija.
Alma/carne/alma/carne;
paso los días deshojándome,
mientras Phi,
ese invento descabellado,
permanece inalterado.

Phi

Phi La vida es esa proporción
que me exige ser (de) alguien.
Amor/odio/amor/odio,
el fino hilo del espíritu
se (des)cose en mi carne
y al final no soy (de) nadie.
No, yo no soy mia,
siquiera soy de mi madre
que me parió creyendo la mentira
de que tendría una hija.
Alma/carne/alma/carne;
paso los días deshojándome,
mientras Phi,
ese invento descabellado,
permanece inalterado.